Este artículo no es para contarte de fracasos en el trading…
Es mas una confesion de tu bro
Hoy no vengo a hablarte de las veces que he perdido cuentas ni a contarte otra historia de cómo el mercado me sacó en stop. Este artículo es para hablarte un poco de mí, y de algo que sé que muchos sienten, pero no todos se atreven a decir.
Yo odio —sí, odio— la idea de pasarme 8 horas al día metido en un sitio, trabajando para alguien más, volver a la casa, dormir, y al otro día repetir la misma rutina… solo para que a final de mes me den un cheque que apenas alcanza. ¡Esa vida NO es para mí!
Yo quiero ser libre. Quiero tener tiempo para mis cosas, para mi familia, para hacer lo que me apasiona… Y claro, quiero tener dinero.
¿Y cómo pienso lograr eso? Emprendiendo.
¿Qué he intentado? ¿Y qué me ha funcionado?
Hasta ahora, he probado varias cosas. Le he dado duro a mis redes sociales, y si me sigues sabes que ahora son —aunque no mi mayor fuente— mi fuente más estable de ingresos.
También le he metido al trading. He perdido más de lo que he ganado, sí. Pero también he ganado… y no pienso rendirme.
Además, he abierto dos o tres tiendas en Shopify, pero ninguna funcionó como esperaba. Y ¿sabes qué? No me voy a rendir.
¿Por qué?
Porque yo no me veo pasando el resto de mi vida viviendo justo al límite, llegando a fin de mes con lo justo, sin poder disfrutar la vida como se debe.
Creo en Dios. Y siempre me digo:
“Si Dios creó tanta belleza en este mundo, ¿por qué yo, su creación, tengo que pasarla mal, ajustado todo el tiempo?”
¡No acepto esa vida!
Por eso prefiero matarme trabajando ahora, enfocarme, y aguantar lo que haya que aguantar hasta lograrlo. Y lo voy a lograr, sí o sí. No hay opción.
Voy a trabajar duro hasta tener la vida que quiero:
- Libre
- Sin un jefe gritándome
- Ayudando a mi familia
- Ayudando a los que pueda ayudar
Si tú también sueñas con eso…
Quiero decirte algo: No estás solo, brother.
Los que emprendemos la tenemos difícil al principio. Pero estoy seguro —y te lo digo con el corazón en la mano— El tiempo que estás invirtiendo hoy, lo vas a disfrutar mañana.
Esto no es un artículo de motivación barata. Esto es la vida real. Y te digo: Sigue. No pares. No te rindas.
Para cerrar
Hoy no hablé de trading. Hoy hablé de la vida.
Porque el trading es solo una parte de este camino llamado emprendimiento. Y si tú estás en este camino, quiero que sepas que tienes mi respeto.
¡Nos vemos en el siguiente artículo! Que Dios te bendiga.
Comentarios
Publicar un comentario